Este año nos hemos propuesto agradar a Dios de distintas maneras y se han planteado diferentes Proyectos de Servicio y uno de esos proyectos es la participación en Brigadas de Limpieza y Mantenimiento de nuestros templos.
El próximo martes 1ro. de mayo tendremos la primera oportunidad del año de ser bendecidos a través de estos operativos de limpieza y mantenimiento, celebrando el "Día del Trabajador" con un "Día de Trabajo para El Señor".
Se realizarán distintas obras , entre las que se destacan:
- Pintura de las diferentes ambientes
- Reparación y acondicionamiento de instalaciones eléctricas
- Mejoras y trabajos de jardinería en los frentes de ambos templos
- Limpieza en general.
- entre otras...
Los esperamos!, Dios les bendice.
Cómo ser feliz en el trabajo
“EL SEÑOR ENVIARÁ SU BENDICIÓN... SOBRE TODO AQUELLO EN QUE PONGAS TU MANO...” (Deuteronomio 28:8)
La felicidad implica que te sientas bien acerca de ti mismo en medio de tus relaciones y tus logros. Cuando tus dones y habilidades alcancen su pleno desarrollo y sean utilizados a través del trabajo de toda una vida, crecerás en confianza y en poder. Aquí tienes siete claves para que seas feliz en tu empleo:
- Ve el trabajo como un regalo del Señor y no como un castigo: “...a todo hombre a quien Dios da bienes y riquezas, le da también facultad para que coma de ellas, tome su parte y goce de su trabajo. Esto es don de Dios” (Eclesiastés 5:19);
- Reconoce a Dios como tu verdadero jefe: “Servid de buena voluntad, como al Señor y no a los hombres, sabiendo que el bien que cada uno haga, ése recibirá del Señor” (Efesios 6:7-8);
- Dedícate a la tarea que sea compatible con tus dones: “Si alguno... ministra, ministre conforme al poder que Dios da, para que en todo Dios sea glorificado...” (1 Pedro 4:11);
- Aprende lo que puedas acerca de tus tareas: “El sabio... escucha y aumenta su saber, y el inteligente adquiere capacidad...” (Proverbios 1:5);
- Aprovecha la crítica para tu ventaja. De hecho, haz que te sirva para algo, pidiendo sugerencias y corrección: “Pobreza y vergüenza tendrá el que menosprecia el consejo, pero el que acepta la corrección recibirá honra” (Proverbios 13:18);
- Haz más que lo que esperan de ti: “...a cualquiera que te obligue a llevar carga por una milla, ve con él dos” (Mateo 5:41). Pertenece al “club” de los que van la “milla extra”;
- Haz que Jesús sea tu “socio de trabajo”. Sigue estando consciente de la presencia de Cristo durante todo el día mientras realices fielmente tus obligaciones (lee Hebreos 12:2): “Tú guardarás en completa paz a aquél cuyo pensamiento en Ti persevera, porque en Ti ha confiado” (Isaías 26:3).
El trabajo es un acto de Adoración
Cuando pensamos en el trabajo, pensamos en cómo éste suple nuestras necesidades materiales ya sean personales o de otros, pero nunca pensamos que el trabajo sea algo espiritual. Es decir, algo que tenga que ver con la gloria de Dios, que sea un acto de adoración.En Colosenses 3:22-24, el Señor nos dice a los que trabajamos que debemos hacerlo para agradarle y no para agradar a los hombres (v.22). Que debemos trabajar como para el Señor y no sólo para los hombres (v.23) y que cuando trabajamos estamos sirviendo a Cristo (v.24).¿Te das cuenta que esta perspectiva puede revolucionar tu vida laboral? Esta perspectiva te dice que no trabajes por la quincena, sino para honrar a Dios. Que no trabajes para tener contento al jefe, sino para agradar a Dios. Que cuando haces un trabajo para la compañía donde laboras estás trabajando para Cristo. No importa cual sea tu ocupación (lícita, por supuesto), si cambias tuberías o reparas computadoras, si cambias pañales o vendes artículos, si enseñas a niños o recoges basura, si diriges al personal de una empresa o lavas y planchas, cuando trabajas puedes glorificar a Dios con lo que haces.
Más allá del salario, de lo popular de tu trabajo, de lo monótono y cansado que pueda ser, recuerda: Eres siervo de Cristo. Estás adorando a Dios al trabajar.